No nos atrevemos a usar un desfibrilador
La mayoría de la población española no se atreve a utilizar un desfibrilador, a pesar de estar diseñados para uso público.
La mayoría de la población española no se atreve a utilizar un desfibrilador, a pesar de estar diseñados para uso público.
Un nuevo estudio muestra que la RCP efectuada por un peatón o alguien que está cerca puede mejorar sustancialmente las posibilidades de sobrevivir a un paro cardíaco y evitar daño cerebral, en especial si se hace de inmediato.
Como apunta Ruth Rodero, la diferencia entre vivir o morir pueden ser las ganas de ayudar de alguien que se cruza en tu camino.
Tu corazón es una bomba, que suele latir entre 60 y 100 veces por minuto. En cada latido, el corazón envía sangre a todo el cuerpo, transportando oxígeno a todas y cada una de sus células.
Los aficionados racinguistas aprenden a practicar RCP mientras animan a su equipo con la canción ‘La vida es un Carnaval’ de la inolvidable Celia Cruz.
La rápida intervención de dos agentes de policía (con una RCP) permitió mantener con vida a un ciudadano hasta la llegada de los servicios de urgencia.
Youtube muestra videos explicativos de primeros auxilios de fuentes sanitarias en la parte superior de los resultados.
España necesita mejorar la formación en programas para aprender a salvar vidas, pues hay países que nos duplican en porcentaje de actuación.
Las posibilidades de supervivencia de alguien que padece una parada respiratoria aumentan en un 70% si se actúa en pocos minutos y todos podemos contribuir a ello.
Los alumnos de un colegio gallego llevan al colegio un peluche para formarse en reanimación cardiopulmonar.